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	Enclavado en un lugar privilegiado, a 10 Km. De San Vicente de la Barquera y 19 Km. de Llanes, entre el mar y las montañas, ofrece a sus visitantes aquello que se hace tan necesario, y que es el complemento ideal para pasar unos días de descanso, el sosiego del campo y la relajada vista del  Cantábrico.     Sería casi interminable la lista de visitas y excursiones que desde aquí, y con los mínimos desplazamientos, se pueden realizar, pero como guía general podemos resaltar algunas.
			Vista aérea de Colombres

	Archivo de Indianos	Torre medieval de Noriega	Casa de Cultura de Colombres

	Sin necesidad de salir de la capital del Concejo podemos visitar el Archivo de Indianos, de principios del Siglo XIX, sede de documentos y muestras que nuestros mayores y antepasados fueron dejando a lo largo de sus vidas en los países de ultramar que a tantos de los nuestros acogieron, ya el edificio en sí, resulta una muestra arquitectónica típica del estilo colonial. En el mismo pueblo, como complemento de lo expuesto se pueden contemplar algunas de las edificaciones que los Indianos fueron ordenando edificar en previsión del regreso a su tierra natal, y que hoy afortunadamente, casi todas ellas, se conservan en perfecto estado, con la posibilidad de visitarlas, ya que algunas de ellas, forman parte del conjunto cultural público del Concejo, como es el caso de la Quinta Guadalupe, hoy Archivo de Indianos, o la Casa de Piedra, hoy reconvertida en Casa de Cultura; en otros, como Noriega, podemos contemplar la “Torre Medieval”, que data del Siglo XIII.
			Pimiango

			En Pimiango las ruinas de Sta. Mª de Tina del Siglo VIII, y la ermita de San Emeterio, ambas en un entorno paradisíaco. Algunas otras ermitas rurales que podemos visitar son la de San Cayetano en Llavandes, la del Cristo del Bao en El Peral y la del Carmen en “El Cantu” de Colombres, donde también podremos ver la Iglesia de Santa María. El folklore de la zona, y las fiestas de toda la comarca nos permiten contemplar los vistosos y elegantes vestidos típicos de Llanisca y Porruano que en las procesiones y fiestas de cada pueblo en todo el Oriente de Asturias, lucen las mozas y mozos del lugar, e incluso algunos foráneos que no quieren perder la oportunidad de lucir los trajes típicos de esta zona; podemos también asistir a la “plantá” de la hoguera, tradición que, aún hoy, conservan en algunos de ellos.
	Ermita de San Emetereo

	El Castro	Playa de Bendía y Viveros	Accesos a la Playa de la Franca

Los acantilados de Santiuste, junto a la playa de La Franca, son el escenario natural donde podemos contemplar los “Bufones”, impresionantes chorros de agua de mar que empujados por las fuertes marejadas del Cantábrico se elevan a mas de 60 mts. de altura. Estar situados en el límite de Asturias con Cantábria, nos permite, en poco más de 45 minutos, acercarnos a Potes para continuar a Santo Toribio de Liébana y Fuente Dé, subir en el Teleférico y disfrutar de la maravillosa vista de Los Picos a dos mil metros de altitud. En otro momento podemos cursar la visita por la costa occidental de la vecina Cantábria visitando San Vicente de la Barquera, Comillas y Santillana del Mar, con todo lo que de cultura, arte paisaje y gastronomía encierran estos tres enclaves.

	La carretera que nos conduce hacia Llanes, y su continuación a Ribadesella, está salpicada de pintorescos pueblos en los que también podremos disfrutar de hermosas playas, y una vez en éste último pueblo podemos visitar las Cuevas y el Museo Arqueológico de Tito Bustillo de alto valor prehistórico, al igual que la Cueva del Pindal , situada ésta última en un acantilado sobre el mar, a sólo diez minutos de Colombres, en el pueblo de Pimiango; de camino a la Cueva del Pindal, del Paleolítico Superior, pasaremos por el “Mirador del Picu”, situado en una atalaya sobre el Cantábrico desde la que podemos contemplar un bonito paisaje de mar y montañas; en Puertas de Vidiago se encuentra el Idolo de Peña Tú, dolmen de la era del Bronce.
			Bufón de Santiuste

La visita a otro pueblo, que nos podría hacer retroceder a la época medieval, es la de Barcena Mayor, en la carretera de la Reserva Nacional del Saja, donde por cierto, según la época del año, también podríamos escuchar la berrea de los ciervos y contemplar numerosos ejemplares de especies animales en su hábitat natural.

Si nos acercamos al Real Santuario de Covadonga, cuna de la Reconquista, podemos contemplar la Basílica, y el resto de edificaciones de todo el conjunto del Real Sitio, dignas de admiración, y desde allí continuar a los lagos Enol y Ercina, en plenos Picos de Europa; antes, habremos pasado por Cangas de Onís, donde se encuentra el Puente Romano, y dependiendo de la época, podremos observar colgando de este, la Cruz de la Victoria, joya de un gran valor histórico, y símbolo de todos los asturianos. La visita casi obligada será la de Cabrales y alrededores, Sotres, Poncebos, Tielve hará que podamos entender de otra manera la suntuosidad de los Picos de Europa, y la merecida fama de la Ruta del Cares, en pleno corazón de los Picos, que cruza de Poncebos a Caín.

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